La Comisión Nacional de Valores firmó este miércoles un convenio con los Ministerios de Economía y de Desarrollo Productivo para la creación de vehículos financieros que permitan entre otras cosas atraer los ahorros minoristas que están fuera del sistema bancario. El documento que lleva las firmas de Adrián Cosentino, Guzmán y Kulfas apunta a captar los dólares de "abajo del colchón" y volcarlos a la construcción aprovechando la tradición de ahorrar en ladrillos.

Los instrumentos que se van a promover desde el mercado de capitales son Fideicomisos Financieros (FF) y los Fondos Comunes de Inversión (FCI). Esta misma semana la CNV presentará la resolución general que los regule tras una consulta pública y diversas mesas de trabajo que recogieron aportes de los sectores involucrados. La idea es respaldar con activos reales estos vehículos para dinamizar la producción y el empleo, con prioridad para los proyectos de alto impacto.

Por ende, no solo van a estar orientados a la promoción de la construcción privada y a otros desarrollos inmobiliarios. Matías Isasa, director de la CNV explicó que estos instrumentos permitirán financiar "proyectos de todo tipo, desde viviendas familiares, hoteles, barrios cerrados y parques industriales".

Isasa destacó que los instrumentos financieros van a ayudar a desdolarizar la economía y también será una solución para inversores institucionales como las compañías de seguros. "Muchas veces el problema es cómo la Superintendencia de Seguros valúa esas inversiones; en cambio de esta forma, en la medida que tenés un instrumento que puede tener un precio en el mercado, va a facilitar que inversores institucionales puedan invertir en proyectos inmobiliarios".

Desde la CNV también destacaron que el rol del Ministerio de Desarrollo Productivo respecto de estos nuevos instrumentos será  "promover la federalización, la defensa de la competencia y la creación de empleo de calidad, además de entender en la elaboración de los regímenes de promoción y protección".